miércoles, 1 de abril de 2015

LA SERPIENTE DEVORA A SUS HIJOS...¿EL PARTIDO DEMÓCRATA? DEPENDE

Por Andrés Pascual

Con el único animal traicionero y peligroso que admite comparación el Partido Demócrata es con la serpiente, milenaria representación del engaño (recuerde la leyenda de Adán y Eva en el Génesis), irrefutablemente debía ser el símbolo de la GRAN PANDILLA DE FILIBUSTEROS DE EUA, protegidos bajo la sombrilla del peor enemigo jamás visto del país que agreden, destruyen y averguenzan.

Ahora quieren moler a Bob Menéndez (foto con Obama en uno de los pocos años felices, que también los tuvo), considerado por la Media en español “poderosa figura”, lo que no creo, porque los poderosos de verdad no tienen problemas, se los buscan a otros, influyen y deciden contra otros, pero no hay reciprocidad ni aunque acaben con medio mundo, como hacen Obama, Holder, los Clinton, los Kennedys...

Tenga en cuenta que referirse a la similitud de Moche con un chimpancé dio origen a una broma y que un poderoso contribuyente con el BIRRA “de los de verdad”, botó al gracioso de un pesado y pedante programa de UNIVISIÓN, violando todos los derechos que, supuestamente y bajo efectos de la Constitución, lo amparaban.

Es precisamente en la Constitución que se observa el poder de los demócratas, porque han logrado minimizar y pisotrear, a base de decretos “tiránicos” presidenciales, su efecto estabilizador como regla obligatoria de la conducta y el itinerario político-social del país. El llamado documento de los Padres Fundadores funciona como cualquier documento maquillado, para desviar la atención, de la peor tiranía comunista de viejo tipo, como la castrista, por ejemplo.

A Bob Menéndez lo quieren eliminar de la vida pública con afectación de su integridad civil, porque se convirtió en crítico del consorcio antiamericano pro-fundamentalista musulmán, negro-comunista, que dirige al país, porque ha criticado al africano en asuntos tan delicados como sus concesiones al castrismo o al Islamismo.

Para perfilar la causa, han de haber utilizado a los agentes de la tiranía en República Dominicana, donde se ha podido comprobar que hay tantos como en Venezuela posiblemente.

Yo no simpatizo con los demócratas, con ninguno, ni protejo a ningún negro que no sea Tiparista, al mejor comunista deseo verlo en las manos del “desventrechador” del EI, a su cabeza quiero decir, lo que supone que tampoco simpatice con Bob Menéndez una verdad soberana; aunque siempre le dejo espacios abiertos solidarios a este hombre, porque, sin haber nacido en Cuba, defiende la causa desde cualquier instancia en que haya tenido voz y voto.


Vamos a ver si Holder, Reid, Pelosi, Biden, los Clinton y los verdaderos “cocotús”, fallan el tiro a traición contra Menéndez; si no la causa cubana, relativamente, porque acoge “como suyos” a la oposición ghandista, por lo menos esos, perdieron un baluarte de interés, que no “poderoso”.