EL CALIFA: POR DECIR ALGO…
Por Andrés Pascual
El radical (en la foto junto a Netanyahu) condenó “la ocupación de los territorios”; pero “autorizó a Israel a utilizar la fuerza contra Irán si…” ¿Autorizó?, bueno, tal vez no sea la palabra adecuada quizás mejor apoyó, no obstante…
¡Aaaaah, condenó la ocupación de territorios por los judíos caray...! Señor, si ahí es que radica el problema, ¿Qué apoyo le dio a los hebreos este tipo entonces?
Hace algún tiempo exigió “la marcha atrás de Israel” hasta las fronteras de antes de 1967.
De solo saber que es un peligroso musulmán, aunque perfecto papanatas que ni para dirigir un supermercado vale la pena, el tipango como que quiere impresionar en el papel de pacificador de reciente hechura, el problema es que no tiene personalidad de líder y, lo peor, su imagen en la silla presidencial americana le ha quitado esa condición a un país que, ahora mismo, es un hazmerreír en el colimador de todos los que quieren arrasar con la nación de la barras y las estrellas como pabellón: ¡LE COGIERON LA BAJA A LOS AMERICANOS, CUALQUIERA SALE Y LE METE UNA NALGADA!
Corea del Norte informó que suspendió “la línea roja”, basura que se inventó para dar la impresión de lo preocupado que pudiera estar un país al borde de tirarle cohetes atómicos a otro al que, por teléfono, le informaría de la decisión. Como “pedir tiempo para orinar en medio de una batalla”, pero de la 1era o la 2da Guerras, para la tercera no habría con qué…
Corea le tiene “bien cogida la baja” que dije antes al califato; a pesar de Kim y de Mao cuando lo del “tigre de papel”, a este chinito feo de esposa bella lo está manejando alguien, supongo que la “Nueva China” y “la estalinista y más Nueva Rusia”: “métele un cuerazo, que ese mulato no hace na’…” lo peor es que tiene que aceptarse como la única posición razonable ante las reacciones del “conversador del gremio artístico”: NO HACE NA’ por tullido, por pusilánime, por antiamericano, por extremista, por comunista, por ínfulas tiránico-dictatoriales, por esas y otras cosas como ser un presidente demócrata de… minorías muy peligrosas.
Hay un grupito que se reunió en Suráfrica en estos días, lo constituye Brasil, India, China, Rusia, Suráfrica… supongo que tiene como objetivo apartarse del sistema económico-financiero internacional, lo que traería como resultado que crezca en número y en poder y se proyecte como otra fuerza formidable del antiamericanismo y del anticapitalismo.
Chipre, país pequeño que está en llamas económicamente, es un reflejo de cómo van ciertas cosas: una vez el sur del país se vio como prometedor emporio económico, lo apadrinaba la Unión Europea, sin embargo, hoy va medio hundido porque su sostenedor se tambalea sin solución ni a mediano plazo; como contrapartida, el pobre norte de ayer, bajo la tutela otomana, va viento en popa, tan bien que sus bancos están saludables, aunque solo expenden la moneda turca en las máquinas y mercados de cambio.
¿A quién hay que agradecerle el crecimiento acelerado de China y Rusia? ¿A quién el intercambio de materia prima recibida para que exporte comidas envenenadas y juguetes homicidas, o ladrones de ideas que saldrán encubiertas en piratas cibernéticos o destructores de sistemas después? ¿Quién es el responsable porque se le venda a rusos ex miembros de la KGB, nuevos capitalistas en un mundo podrido, todo Miami Beach, parte del imperio del juego americano y miles de concesiones urbanísticas y de otras ramas? ¿Quién los ha hecho partícipes del negocio en las Costas Blanca, de Oro y Azul de Europa? ¿Quién provocó que Occidente se viera afectado y asaltado por ese hato de pandilleros vulgares que se pasean como serios potentados en un mundo al que combatieron con represión y muerte hasta ayer, si es que desecharon la idea?
Los Estados Unidos y Europa son los responsables y le toca a Obama, por intereses propios y de partido, consumar la entrega que con seguridad contempla el antisemitismo como una de las primeras y más importantes voluntades de la mentalidad gris que tiene detrás.
Los judíos que desean sobrevivir conocen eso, luego el viaje del califa a territorio hebreo no fue más que otra pantomima de este sarraceno que tanto la dirigencia israelí como el propio pueblo en peligro conocen, a pesar de esa otra sarta de basura farisea que les ofreció por apoyo.
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